el segundo grito del parto
Muy lentamente se revelan las imágenes de una fotografía que no ha sido terminada
Pequeñas poses que recuerdan un poético travesti en la cima del mundo
Colores inexpertos tratando de parecer claroscuros en el fondo de la tierra, pájaros que desean la huida pero han quedado fijos por el obturador inmisericordioso
Tuvalu es aquí una puta que amenaza ser hollywoodense
Se puede ver una que otra patraña de artista: el azar, el encuentro, la sublimación y el ego
Y todo oscurece porque la luz esta vez era la invitada.